Desde épocas prehistóricas,  antes del uso del fuego, el hombre y la mujer siempre han comido de la misma naturaleza como frutos, semillas, raíces, peces, algas, plantas y hierbas para depurar su organismo, mantenerse fuertes y evitar ser vulnerables. Es por eso que todas estas etapas de nuestra evolución están todavía grabadas y codificadas dentro nosotros mismos y en la esencia de cada célula, y si hoy hacemos lo contrario comiendo alimentos tóxicos, desnaturales o fabricados por el hombre, estaremos rompiendo enlaces eternos y sellados que únicamente el cuerpo reconoce sin aceptar otro cambio. Hacer lo contrario significa terminar en una enfermidad; sin embargo, si seguimos firmes o retomamos nuestras etapas anteriores evolutivas siempre habrá buena salud y las enfermedades desparecerán sea cual sea su avance. 

 

Es necesario retornar a los estados biológicos más primitivos y naturales para poder sanar, y solo aqui en las consultas les enseñaré cómo harcerlo de una manera científica y más completa.